Raúl Alba dedicó su colección de ensueño a la memoria de su madre, misma que llevó su nombre “María Luisa” y cautivó a todos los presentes de Unimodaa 2015.
Es egresado del CONALEP y con mucho orgullo, manifiesta no tener la Licenciatura en Diseño de Moda, pero nada más y nada menos que veinte años de experiencia. “Yo quería ser contador pero tenía la habilidad por el dibujo”.
Realizó una colección que desborda en detalles y aplicaciones, destacan las técnicas manuales que sabemos llevan horas de trabajo arduo en tan solo en mes y medio. “Yo patrono, yo corto, yo coso. Sólo me ayudan con el bordado”.
Comenzó cobrando $5 por hacer una bastilla y Unimodaa 2015 reconoció su talento y esfuerzo con el espacio, no solo para presentar la colección, si no para una ronda de preguntas y respuestas donde su gran carisma, sencillez y honestidad se ganaron al público. Recomienda a los estudiantes adquirir muchas habilidades técnicas y no quedarse solo con la teoría, sino dominar la práctica.
“Y después andan cosiendo cierres al revés”.
Usó blanco Ivory porque para él la pureza total no existe. Negro por el luto ante la pérdida de su madre. Los tonos de gris y acero para representar lo banal de los momentos fríos que todos tenemos, donde somos egoístas o superficiales. Y el rojo por la gran pasión que siente por la vida y que definitivamente se transmitió en sus diseños. Abundó la textura visual que logró experimentando con telas de distinto peso, estampados variados.
“Yo me imagino a la mujer siempre en vestido” Y a más de una nos encantaría usar una de sus creaciones. Sus siluetas son halagadoras para el cuerpo femenino.
“No dejen nunca de soñar” fue el mensaje más importante que quiso dejar a los estudiantes asistentes al Congreso.
Fotos FB Unimodaa oficial
Jimena Jiménez